21 de marzo de 2019
Con motivo del Día Mundial contra la Discriminación Racial, la FSM reafirma su posición estable frente a todas las formas de discriminación racial. La FSM, fiel a sus principios internacionalistas, une las voces de más de 95 millones de trabajadores organizados en todo el mundo sin importar la raza, el género, la religión, el color de la piel, la edad.
No hay lugar para la discriminación racial en el movimiento sindical. La discriminación racial y otras formas de discriminación se generan y se mantienen para que los monopolios, las corporaciones transnacionales, los mecanismos imperialistas y los gobiernos reaccionarios protejan sus intereses y mantengan la explotación de clase. Las organizaciones e ideologías nazis, neonazis y racistas son instrumentos del sistema capitalista y enemigos de la clase obrera y los estratos populares.
Expresamos nuestra profunda solidaridad de clase con los millones de trabajadores inmigrantes, los millones de refugiados que enfrentan la doble explotación, como parte de la clase trabajadora, pero también como inmigrantes. Todos los trabajadores, ya sean extranjeros o locales, son hermanos de clase y nuestras luchas son comunes, sin importar la nacionalidad, la raza, el color de la piel o la religión. Deben tener un frente común y construir su unidad de clase aparte de las divisiones y discriminaciones que les imponen las fuerzas gobernantes. La fuerte lucha de orientación obrera de los trabajadores y la gente puede derrotar la discriminación racial, el racismo y la xenofobia.
La secretaria
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